domingo, 4 de octubre de 2009

Mañana Intensa

... La Ducha...

Llegamos a la ducha con la ansiedad en la que antes nos habíamos adentrado, el agua estaba helada y aun así no lo sentíamos por todo el calor q nos envolvía, ya desnudos nos abrazamos mientras nuestras bocas se encontraban hambrientas de lujuria.

Entonces enjabone la esponja y comencé a tallarte todo el cuerpo, primero tu torso ancho que tanto me gusta, tus hombros fuertes llenos de esa hombría que tan loca me suele volver, el roce de la esponja así como de mis manos en tu piel, logro excitarte extremamente.

Siguió mi recorrido y acaricie ya sin esponja y solo con mis manos bañadas en jabón tus muslos, pude ver como a pesar del agua tu boca se secaba de las ganas que tenias de que tocara tu verga mojada, tu verga dura, tu verga mía.

Antes de detener mis manos en esa erección tan deliciosamente grande enjabone tus piernas, hincada en la regadera, mirándote extasiada, por el panorama tan excepcional que me estabas ofreciendo.

El agua acabo con todo el jabón que había usado en tu cuerpo, y cuando él no me impedía el paso, comencé ahora si a acariciar tú pene.

Mis manos saboreaban ferozmente tu hombría, jugando con ella desde la base hasta la punta, mientras tus ojos ya no me veían, echabas tu cabeza para atrás del mucho placer que sentías.

En ese instante metí tu verga en mi boca, y como por arte de magia tu cara volvió a dirigirse a mí, para percatarte de la carita de zorra que seguramente tenía.

Mi saliva ayudaba al agua a mojarte, mis labios acariciaban tu erección con esa mezcla de dulzura y salvajismo que tanto te excita, con las pocas fuerzas que te quedaban me agarraste el pelo, y comenzaste a marcar el ritmo para que te mamara.

Mi entrepierna se estaba mojando de una manera extraordinaria, y ni el agua más helada podría esa mañana apagar el fuego de nuestras ganas.



Cuando estabas a punto de alcanzar el orgasmo, me pare repentinamente, dejándote en la cima, me puse de espaldas a ti, y restregué mi culo en tu pene, comenzaste a acariciarme la entrepierna húmeda, y en ese instante… cerré el grifo del agua, Salí de la ducha, me envolví en la toalla te avente la tuya. Y con un pequeño guiño te aclare:

-Mi vida, aún no es tu momento-


9 comentarios:

  1. Cruel y despiadada

    Princesa y ...mía, al parecer te enloquece jugar con mi corazón y no por los sentimientos, sino por el altibajo que le provocas a mi verga jugando con mi excitación y tu afán de hacerme disfrutar.

    Te amo, sabes?

    El morbo de lo que pase mañana me está volviendo loco

    ResponderEliminar
  2. aysh! que ricura pero pooobre
    dejalo terminar,
    si el momento no es ahora cuando lo sera?

    ResponderEliminar
  3. Superchika, el momento talvez venga en la parte 3 de esa mañana intensa ;)

    ResponderEliminar
  4. Desde luego esa sí que es una tortura... aunque sea placentera. Espero que no le dejaras con las ganas...

    ResponderEliminar
  5. Y con la sonrisa medio colgada por el corte de energía, con el cerebro todavía anestesiado por la magia de piel, me dio tiempo a pensar ... vale no se mi momento ahora, pero ¿será el tuyo? y con mi toalla comencé a secarte por las piernas para arriba hasta llegar a donde no podía secarse el torrente. Tu sexo cascada. Mi lengua dijo, si ... es tu momento. :)

    ResponderEliminar
  6. hayyy me dejas con una erección mujer que mala....pero vamos a seguir....?

    ResponderEliminar
  7. No hay problema... hay q saber seguir leyendo.
    Calentón en la ducha y cuando crees q todo va a salir de maravilla...¡retirada a la retaguardia! está claro que el tema terminó en otro sitio, donde nadie os pudieramos ver. verdad Luna? ^_^

    ResponderEliminar
  8. @Lydia: a mi hombre nunca lo dejo con ganas, la espera siempre vale la pena.



    @Nadie Seductor: me gusta tu final alternativo, pero me fascina más lo que sigue en mi historia, te invito a que no te lo pierdas.



    @Real Fenix: Nosotros siempre seguimos y seguimos y seguimos. Te invitamos a que sigas con nosotros!!



    @Juank: Y hay que saber seguir volviendolo loco también, por supuesto que termino en otro sitio, pero claro que los dejare asomarse.

    ResponderEliminar
  9. Ufffffffff madre mia !!! con que ganas has dejado al chico... esa ultima parte de ponerte de espaldas y restregarle el culo !! tu si que sabes como ponernos a mil !!

    ResponderEliminar